Todos los ojos puestos en Canadá como la primera nación del G7 en legalizar la marihuana

Como el primer país del G7 en legalizar la marihuana, todos los ojos están puestos en las nuevas leyes de Canadá. El gobierno federal ha dejado en manos de las provincias la implementación de regulaciones que prevengan el consumo de menores y la actividad delictiva. Algunas de las preguntas abiertas incluyen cómo regular los precios de la droga, cómo evitar que llegue al mercado negro y cómo garantizar que los empleadores no contraten a personas drogadas. El Dr. Bernard Le Foll, profesor de la Universidad de Toronto, está preocupado por cómo el país difundirá la información.

Se espera que el gobierno recaude enormes sumas de dinero de las ventas de marihuana medicinal y cannabis recreativo. Business of Cannabis encargó una investigación a Nanos Research, que mostró que los canadienses quieren más educación sobre el uso adecuado y responsable de la marihuana. Una encuesta semillas big bud reciente encontró que el 25 por ciento de los canadienses está de acuerdo con los esfuerzos de la industria para garantizar que la marihuana se use de manera responsable. El gobierno debe hacer cambios si quiere asegurarse de que las nuevas leyes no pongan en peligro a los canadienses.

La noticia de que Canadá se está preparando para legalizar la marihuana ha suscitado reacciones encontradas. El presidente Donald Trump ha ridiculizado repetidamente al primer ministro canadiense, Justin Trudeau. Sin embargo, la mayoría de los canadienses apoyan la legalización de la marihuana y son la primera nación del G7 en hacerlo. El ministro de seguridad pública de la provincia, Mike Farnworth, instó al gobierno a cambiar la ley tan pronto como crezca la demanda de marihuana.

Canadá ha sido durante mucho tiempo un defensor de la marihuana, y su legalización lo convertirá en el segundo país más popular después de Uruguay en el G7. A pesar de las campañas de concientización pública, muchos aún se preguntan si la industria del cannabis está lista para manejar la legalización de la marihuana. No obstante, el país tiene una rica historia de consumo de cannabis, y su éxito tendrá enormes implicaciones para el futuro de la droga.

Se espera que la legalización de la marihuana tenga muchos efectos positivos para el país. El gobierno ha esbozado varios planes para la legalización del cannabis. Entre ellos está la despenalización de la marihuana. Esta legislación ayudará a restringir el acceso a la droga a los jóvenes, reducir la carga sobre el sistema de justicia y reducir el mercado ilegal de la droga. Es probable que tenga un impacto de gran alcance en el país.

Además de legalizar la droga, Canadá también quiere legalizar la marihuana con fines recreativos. La legalización de la marihuana es un gran paso para el país. Si bien puede haber sido una decisión difícil de tomar para algunas personas, el proceso ahora ha entrado en una fase de incertidumbre. El gobierno federal quiere facilitar el proceso y hacerlo más accesible al público. Si bien la legalización de la marihuana es un importante paso adelante para la nación, también tiene su propio conjunto de desafíos que superar.

La introducción del cannabis en Canadá debe incluir conversaciones significativas sobre los beneficios y riesgos de la sustancia. El gobierno debe asegurarse de no crear una cultura del miedo. Debería ser una conversación inclusiva sobre la seguridad del cannabis. Y también debe estar respaldado por un estudio basado en la evidencia. Además de legalizar la droga, el gobierno también debe garantizar que sea segura para consumir.

Una encuesta reciente sugiere que siete de cada 10 canadienses están a favor de legalizar la marihuana. Pero eso no significa que la legislación deba ser tan rígida como controvertida. El gobierno canadiense debería poder adaptarse a las condiciones y preocupaciones cambiantes, y estar dispuesto a ceder en las reglas. Si bien los legisladores de Canadá deben respetar las preferencias de sus ciudadanos, el país debe ser justo con sus consumidores legales de marihuana.

Además de la legalización de la marihuana, Canadá también es miembro del Consejo de Políticas de Drogas de las Naciones Unidas. Sus miembros están preocupados por los impactos de la legalización en la salud, el bienestar y la seguridad del país. Las recomendaciones del comité se basan en los objetivos del G7. Esos objetivos son una prioridad para cualquier nación que quiera legalizar la marihuana.